El brote de legionella han
contagiado ya a 220 personas, de las cuales 32 están ingresadas, cinco de ellas
en unidades de cuidados intensivos. Desde la Consejería de Sanidad esperan que
estos nuevos afectados sean “los últimos coletazos” del periodo de incubación y
que el brote vaya remitiendo.
Según el último parte facilitado
por la Consejería de Sanidad, de los 32 hospitalizados, tres se encuentran en
la UCI del Hospital de Ciudad Real, dos en la de Alcázar de San Juan, mientras
que los 27 restantes reciben atención en el Hospital de Manzanares.
La afluencia de personas
afectadas por la bacteria al servicio de urgencias de Manzanares ha ido
disminuyendo desde mediados de semana, según la Consejería, que ha recordado
que hasta el momento el brote de legionella se ha cobrado la vida de dos
personas, dos varones de 73 y 84 años con diversas patologías asociadas.
De momento se siguen barajando
como posibles focos de contagio de la legionella una fuente ornamenta cercana a
la estación de autobuses y una torre de refrigeración de una empresa privada
situada en el Polígono, que permanecen selladas, al igual que el más de un
centenar de puntos que han sido revisados.
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